Los Estados según la
religión
Estado
laico y estado aconfesional
Se
denomina Estado laico o secular al Estado independiente de
cualquier organización o confesión religiosa o de toda religión y en el cual
las autoridades políticas no se adhieren públicamente a ninguna religión
determinada ni las creencias religiosas influyen sobre la política nacional.
En
un sentido estricto, la condición de Estado laico supone la nula injerencia de
cualquier organización o confesión religiosa en el gobierno del mismo, ya sea,
en el poder legislativo, el ejecutivo o el judicial. En un sentido laxo, un
Estado laico es aquel que es neutral en materia de religión por lo que no
ejerce apoyo ni oposición explícita o implícita a ninguna organización o
confesión religiosa. Es importante señalar que no todos los Estados que se
declaran laicos lo son en la práctica.
A
diferencia del Estado laico, un Estado
aconfesional es aquel que no se adhiere y no reconoce como oficial ninguna
religión en concreto, aunque pueda tener acuerdos (colaborativos o de ayuda
económica principalmente) con ciertas instituciones religiosas.
Estado
ateo o ateísmo de Estado
Ateísmo de Estado es un término utilizado para
referirse a un gobierno que es antirreligioso1, antiteísta o
promueve el ateísmo2. En contraste, los estados laicos son
oficialmente neutrales en materia de religión, sin apoyar la religión o
irreligión. Ateísmo de Estado también puede referirse al anticlericalismo de un
gobierno que se opone al poder institucional religioso y su influencia en todos
los aspectos de la vida pública y política.
1
La antirreligión es la oposición a la religión. Puede tratarse de un
sentimiento negativo hacia religiones organizadas convencionales o extenderse
hasta incluir cualquier forma de creencia en algo sobrenatural o divino. La antirreligión
se distingue del ateísmo (la ausencia de la creencia en dioses), del antiteísmo
(la oposición a la creencia en dioses) y del anticlericalismo (la
oposición a la influencia de las religiones organizadas en la política y en la
sociedad), aunque una misma persona puede entrar en más de una categoría.
2 El ateísmo es el rechazo
a la creencia en la existencia de una o más deidades. En sentido estricto, es
la postura expresa en la que no existe ningún dios. En un sentido más amplio,
es la ausencia de creencia en que exista alguna deidad. Se opone al teísmo,
que en su forma más general es la creencia en la existencia de al menos una
deidad.